En junio próximo, la Selección chilena disputará la Copa Confederaciones por primera vez en su historia, gracias a su calidad de campeón de América. Y pese a que todavía faltan algunos meses ara ese desafío, en la ANFP ya están trabajando en dar con partidos amistosos para que la Roja llegue bien preparada.
Según publica El Mercurio, el ente rector del balompié criollo está negociando con las federaciones de Rusia y Rumania para cerrar pronto los cotejos, que serían en Europa y antes de que el conjunto de Juan Antonio Pizzi debute en el certamen el 18 de junio frente al campeón de la Copa Africana de Naciones.
“Las conversaciones están muy avanzadas para concretar esos dos amistosos”, reconocieron desde el organismo de Quilín al matutino.
En ese sentido, la opción de jugar contra los dueños de casa de la Copa Confederaciones sería en Moscú, aprovechando que ambas selecciones estarán en grupos diferentes en el torneo.
En tanto, contra Rumania el compromiso sería en Bucarest, después del 10 de junio, cuando ese combinado visite a Polonia por las Clasificatorias europeas para el Mundial 2018.
