Durante esta jornada el superintendente de Salud, Sebastián Pavlovic deberá decir si se prorroga el “corralito” impuesto a la isapre Masvida, que básicamente impide que los 540 mil afiliados que aún quedan en dicha entidad aseguradora la dejen.
Esto, porque el interventor de la isapre, Roberto Rivas, solicitó dicha prórroga de manera formal, ya que mañana viernes 31 de marzo se acabaría ese “corralito”.
De acuerdo con lo señalado por Rivas y otros expertos, mantener ese embargo resulta indispensable para continuar desarrollando acciones tendientes a salvar la isapre con la llegada de un nuevo accionista mayoritario.
Y es que si el “corralito” se acaba mañana, es muy probable que se produzca una espampida de los afiliados rumbo a otras aseguradoras de Salud, dejando a Masvida como una entidad muy poco atractiva como para invertir en ella, comprando su cartera de clientes jóvenes y sanos. Eso porque durante el verano recién pasado -mientras no había embargo- más de 30 mil cotizantes se desafiliaron de Masvida.
Hasta el momento, la única oferta formal por la cartera de esa isapre es la que presentó Nexus que, de acuerdo a lo señalado por David Medina -el nuevo presidente de Masvida-, contempla la creación de una nueva sociedad que se encargaría de los afiliados y de parte importante de los pasivos de la empresa, fundamentalmente con sus prestadores.