El presidente de la Conferencia Episcopal, obispo castrense Santiago Silva, y el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, expresaron su rechazo al anuncio de la Presidenta Michelle Bachelet de enviar al Congreso, en el segundo semestre del año, un proyecto sobre el matrimonio igualitario.
Al respecto, el cardenal Ezzati manifestó que es de público conocimiento “cuáles son los principios de la Iglesia, y cuáles son nuestras convicciones, y esas convicciones las mantenemos más allá de cualquier tipo de proyecto, porque no es lo mismo que algo sea legal y que sea éticamente bueno para el país”.
En relación a los anuncios realizados por la Jefa de Estado en torno al llamado “matrimonio igualitario” y la despenalización del aborto, el presidente de la Conferencia Episcopal de Chile afirmó que “estos temas son especialmente delicados.
Por su parte, el obispo Silva incluyó el aborte en tres causales y dijo que son temas que “merecen una amplia discusión, dónde podamos participar todos los actores de la sociedad que tengamos algo que decir, en vistas de nuestra preocupación por los derechos humanos, por la dignidad de las personas. Estos temas de la vida humana y la familia son especialmente delicados”.
En el caso particular del matrimonio igualitario, el obispo expresó que “ratificamos nuestra mirada humanista y cristiana sobre el matrimonio, que debe ser entre un hombre y una mujer, para toda la vida”.
En cuanto a la situación en La Araucanía, el presidente de la Conferencia Episcopal reiteró la necesidad de soluciones justas y pacíficas.
“Justicia, reparación y paz en La Araucanía es lo que esperamos para las personas que habitan en esta zona del país, y que tanto han sufrido. No debemos permitir que las legítimas demandas de justicia por parte de sectores del pueblo mapuche, resulten invisibilizadas por el actuar de diversas facciones que, lejos de contribuir a la paz, han acrecentado las tensiones. Ojalá el Informe de la comisión que encabezó monseñor Vargas se traduzca en decisiones que ayuden en este propósito”, dijo.
El cardenal Ezzati, por su parte, reconoció que lo que sucede en La Araucanía “es un tema que me interesa muchísimo y que he vivido muy de cerca cuando fui arzobispo de Concepción. En este camino valoramos el respeto de las identidades, el saber que todos estamos llamados a construir unidad y el bien de todos. Eso es fundamental para que exista reconocimiento e integración real de los pueblos originarios, especialmente del pueblo mapuche, a la vida y la historia de Chile”.
