En el marco de la discusión del proyecto de identidad de Género en la Cámara Alta, el Senado aprobó este martes la exigencia de certificados médicos a personas trans mayores de 18 años que quieran cambiar su nombre y sexo legal.
Además, los senadores dieron luz verde a que las personas casadas no podrán cambiar su nombre y sexo legal, pero los convivientes civiles si contarán con ese derecho, diferencia de criterios que a juicio del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh) “demuestra que el Parlamento aún no entiende la realidad que está legislando, ya sea por prejuicios, discriminación o ignorancia”
“Debemos reconocer que esto va de mal en peor, pues en la actualidad las personas trans sí pueden cambiar su nombre y sexo legal, pero esta ley lo impediría, lo que es un retroceso grave y mayúsculo”, sostuvo el dirigente del Movilh, Rolando Jiménez.
Jiménez añadió que “esta situación se da porque los legisladores confunden la orientación sexual con la identidad de género y piensan que de permitir a casados el cambio de nombre y sexo legal, los homosexuales podrían legalizar su unión. Pues eso no ha pasado, es absurdo que sucede. La homosexualidad no es lo mismo que la transexualidad”.
“Es la misma ignorancia o el mismo desprecio por la diferencia lo que lleva al Parlamento a permitir que los convivientes civiles sí puedan cambiar su nombre y sexo legal”, redondeó Jiménez.
Para Jiménez “es claro que la ley que saldrá del Senado no contará con nuestro apoyo, por lo que deberemos luchar porque se mejore en la Cámara. Por lo mismo esto debiese ser más rápido y el hecho de que hoy nuevamente no lograra ser despachada es muy lamentable”.
La Sala seguirá la discusión de la norma mañana miércoles
