El carabinero que ayer repelió a balazos un asalto, sargento 1° Rodrigo Vega Mayorga, recordó los tensos momentos que vivió cuando andaba de compras junto a su esposa y una de sus hijas en el mall Plaza Oeste, donde cinco delincuentes robaron relojes después de romper las vitrinas de la tienda Paris.
“Me di cuenta de lo que estaba pasando cuando escuché los gritos de la gente y lo primero que hice fue poner a resguardo a mi señora y mi guagua (su hija Constanza de 14 años), luego saco mi arma, los delincuentes me ven y escapan”, dijo el sargento al iniciar su relato.
“En el sector del estacionamiento los conminé a entregarse, lógico que no me hicieron caso y me vi obligado a usar mi arma con las consecuencias por todos conocidas. Se salvaron porque arrancaron antes de que alcanzara a recargar”, añadió.
El sargento Vega vació todo el cargador de su pistola particular CZ 9 milímetros y cuando estaba recargando, los delincuentes escaparon en un vehículo. Todo en medio de la conmoción de las personas que se encontraban en el mal y que huyeron o se arrojaron al suelo al escuchar los disparos.
Posteriormente, los cinco delincuentes fueron capturados en los alrededores del Hospital El Pino, en San Bernardo, hasta donde llegaron buscando atención médica. Cuatro antisociales resultaron heridos de diversa consideración, pero ninguno quedó en riesgo vital.
El sargento Vega dijo que se vio obligado a intervenir, “porque estamos de servicio los 7 días de la semana, los 365 del año. Eso de las vacaciones es un trámite administrativo, siempre estamos de servicio”.
En efecto, el funcionario policial se encuentra de vacaciones en Santiago desde el domingo pasado y regresará la próxima semana a Arica, donde ejerce como instructor de la Escuela de Formación de Carabineros. En la capital, su hija mayor Karina (21) estudia para aspirante a oficial de la institución. Constanza está en primero medio.
