Esta tarde en el Senado se desarrolló la audiencia especial que trató la grave crisis que afecta al Servicio Nacional de la Infancia (Sename) y la Política Nacional de la Infancia, luego de que la Cámara de Diputados rechazara el informe final de la Comisión Investigadora Sename II.
En la sesión se destacó “el tono” conciliador con el que se llevó adelante el debate, con el mea culpa de que las políticas asociadas han fracasado y la coincidencia de que la problemática va más allá de los recursos que se destinen a la institució.
También se resaltó que el servicio debe ponerse a tono con las problemáticas vigentes de los menores vulnerados, para evitar que ocurran muertes, abusos sexuales, entre otras prácticas que afectan a los niños de la entidad.
En la reunión se acordó con el ministro de la Secretaría General de la Presidencia, Nicolás Eyzaguirre, realizar reuniones mensuales con la comisión especial encargada de tramitar proyectos de ley relacionados con los niños, niñas y adolescentes, para informar los avances de la problemática.
Todos los presentes respaldaron un proyecto de acuerdo, por medio del cual se solicita a la Presidenta de la República la adopción de una serie de medidas con el objeto de afrontar la crisis.
Al encuentro, asistió el ministro de Justicia, Jaime Campos, quien manifestó que el pueblo chileno “está angustiado y conmovido por la infancia vulnerada”.
“Nos aflige y violenta, esta es la convicción que tiene el Gobierno de Chile”, sentenció el titular de la cartera.
En dicho contexto, el secretario de Estado reconoció que “la política e institucionalidad en esta materia está completamente colapsada y por ende es menester hacer esfuerzos sustantivos para transformarla e implementar todas las medidas de mejoramiento y gestión que proceda”.
“Sin embargo -y lo digo con dolor y a título personal- no se advierte que hayamos provocado una transformación o generado impacto notable (…) Lo que me permite afirmar que aquí no hay solo un problema de recursos, sino que uno más estructural”, lamentó.
Asimismo, el ministro de Hacienda, Rodrigo Valdés, recordó que el Sename tiene un presupuesto este año de 280 mil millones de pesos, 65% de esta suma, se destina a transferencias a los organismos que son colaboradores y un 35% está en administración directa.
Con esto, acotó, “la evolución presupuestaria este año tuvo un crecimiento del 6%, con 16.500 millones de pesos, más del doble de lo que creció el presupuesto total del país”.
En tanto, Solange Huerta, directora nacional del Sename, manifestó que el presente año se han enfocado a lo que han llamado “un periodo de transición”, en donde se definieron líneas de acción como el “asegurar el derecho a salud a los niños; el trabajo intersectorial; mejorar la gestión del servicio; política con cambio de mirada, para que nunca más tenga que existir una comisión investigadora”, detalló Huerta.
Asimismo, aclaró que es importante no olvidar el fondo de los problemas y no centrarse cada vez en los síntomas. “Puedo asegurar que muchas veces los niños van a necesitar del Estado, por los problemas dentro de la familia, por ello debemos generar cambios de fondos y asegurar estándares de este siglo”, afirmó.
