El presidente del Senado, Andrés Zaldívar, transmitió al fiscal nacional Jorge Abbott la inquietud de la Cámara Alta por la decisión del fiscal metropolitano Oriente, Manuel Guerra, de investigar todas las asesorías externas por el caso de Alejandro Guillier.
“Hablé ayer con el fiscal Abbott por encargo de todos los comités y le manifesté que la solicitud de los fiscales requería de parte nuestra un estudio, porque creíamos que no estaba ajustada a los términos que se debe hacer. Es delicado”, señaló Zaldívar a El Mercurio.
El fiscal Guerra estimó necesario investigar no sólo las asesorías externas de Guillier, las que serían simples “copy-paste” por las que pagó $19 millones con cargo al Estado, sino que hizo extensiva la indagatoria a todos los senadores por los contratos entre 2011 y 2016.
“No puede hacerse una denuncia general, me preocupa que la institución es puesta en tela de juicio en su conjunto… No puede aparecer la institución sometida a un proceso”, añadió Zaldívar, quien también coincidió con el senador Hernán Larraín, quien señaló que los fiscales “rayan en la ofensa”.
Zaldívar confirmó que el Senado está realizando una evaluación jurídica sobre la manera en que responderá al oficio del fiscal Guerra, quien solicitó los informes de asesorías externas de todos los senadores en el período señalado. Esta evaluación quedó a cargo de la Fiscalía de la Cámara Alta.