El Senado rechazó entregar a la Fiscalía Regional Metropolitana Oriente el informe que solicitó sobre las asesorías externas entre los años 2011 y 2016, por considerar que excede las atribuciones del ente persecutor y que no respeta la presunción de inocencia, en el caso de los copy-paste.
El martes pasado, el fiscal regional metropolitano Oriente, Manuel Guerra, envió un oficio a la Cámara Alta con dicha solicitud, después de conocerse la situación del senador Alejandro Guillier. Esta diligencia se enmarca en una investigación iniciada hace un año por falsas asesorías.
Según publica hoy El Mercurio, los abogados de la fiscalía interna del Senado estudiaron la solicitud, tras lo cual enviaron su respuesta al fiscal nacional Jorge Abbott con el rechazo a la petición. Incluso, le piden “tomar las medidas que sean necesarias para rectificar las actuaciones de la Fiscalía de Alta Complejidad (Oriente), de manera de no dañar la presunción de no culpabilidad de que gozan los integrantes de esta corporación y evitar abusos en el ejercicio de sus funciones”.
También expresan que la acción del Ministerio Público es “absolutamente desproporcionada, excede ampliamente las facultades y potestades de quien ejerce la persecución penal, que se aleja completamente de la investigación de un hecho preciso y determinado que surge de la denuncia en referencia y que más bien pretenden dar notoriedad y relevancia pública a quien así la ordena”.
Añade que este proceder “crea un manto de sospecha sobre la actividad de los parlamentarios, que atenta seriamente sobre el principio de no culpabilidad”.
Finalmente, la respuesta del Senado expresa que “en razón de los fundamentos de hecho y de derecho expuestos precedentemente, el Senado no puede acceder a lo solicitado en las condiciones requeridas. No obstante, está plenamente disponible para entregar la información pública que se requiera, en la forma prescrita en la Constitución y la ley”.