Desde la clandestinidad, Jorge Huenchullán, uno de los dos comuneros mapuche prófugos tras la denominada “Operación Huracán”, donde se detuvo al vocero de la CAM, Héctor Llaitul Carrillanca, y a otras siete personas, afirmó que “voy a seguir resistiendo y dando la lucha por la liberación de nuestro pueblo”.
En entrevista con radio ADN, Huenchullán señaló enfático que no se presentará ante los tribunales de justicia debido a que, a su juicio, no existen las garantías necesarias para que se realice un proceso judicial efectivo.
“Yo no les voy a dar el gusto de presentarme ante un tribunal huinca donde no se me dé la garantía de un debido proceso”, indicó el comunero.
Asimismo, emplazó al Estado a que “nuestra gente sea liberada” y aseguró que “vamos a ganar este juicio y lo vamos a ganar en un par de meses”, agregó.
El hermano de uno de los detenidos en la operación también cuestionó que los procesos con los mapuche se investiguen y persigan bajo la Ley Antiterrorista.
“Conocemos de cerca cuáles son los argumentos que presenta el Ministerio Público cuando quiere imputar a los mapuches bajo esta ley”, acotó.
El comunero, además, rechazó las pruebas que presentaron los fiscales, como por ejemplo los mensajes de Whatsapp en los que supuestamente se coordinaban para cometer los ilícitos.
“Es uno de los montajes más absurdos y mafiosos”, sostuvo, y agregó que esas pruebas no serían aceptadas “en ningún tribunal del mundo”.
Huenchullán finalmente acusó “descontrol del Estado para silenciar la lucha mapuche, por querer demostrar que son eficaces para perseguir a dirigentes mapuches (…) pero dejan mucho que desear”.