A pesar que las utilidades de las Isapres crecieron el 2016 un 62%, obteniendo por éste concepto más de $51 mil millones (según el informe de resultados financieros realizado por la Superintendencia de Salud), éstas se han negado por décadas a modificar la regulación a objeto se le pague al trabajador los 3 primeros días de recuperación del periodo de su convalecencia.
Actualmente para que a un trabajador cotizante le paguen todos los días de la licencia, ésta debe ser al menos de 11 días corridos. Si es menor a ese tiempo, pierden la remuneración de los 3 primeros días de licencia, es decir, si la licencia es por 5 días, te pagarán sólo el cuarto y el quinto día. Si es por 11 días, te los pagarán todos, salvo que seas funcionario público, donde los trabajadores tienen el beneficio que les paguen los 3 primeros días a todo evento.
Lo anterior produce que generalmente el trabajador asista a trabajar en malas condiciones de salud, negándose a presentar la licencia a su empleador, debido que de hacer uso del descanso para su recuperación le significa inmediatamente un descuento del 10% en su remuneración.
Tal y como lo leyó; está normativa perjudicial para el trabajador, ocurre a pesar que la rentabilidad de las Isapres el 2016 se elevó un 18,4% sobre capital y reservas, siendo el promedio un 25,3% de los últimos cinco años, aumentando la ganancia bruta en un 11,3% a $270.176 millones, una cifra récord en los últimos cinco años. “Ninguna Isapre obtuvo pérdidas”, consigna la Superintendencia.
Es un hecho que una modificación como ésta, que beneficia a los trabajadores, no se puede esperar de un candidato como Sebastián Piñera, considerando la representación empresarial que ostenta. Entonces, Alejandro Guillier debería comprometerse con el país, que durante su mandato presentará las modificaciones legales necesarias para imponer el derecho a la recuperación de una enfermedad; equiparando los derechos entre trabajadores del sector público y del sector privado.
Ojalá esta propuesta sea considerada por el candidato de la nueva mayoría, como una oportunidad de acercarse a los ciudadanos desilusionados de la política, los que podrían ver en él, no solo una alternativa anti Piñera, sino, un líder en quien volver a creer, y a quien confiarle los destinos de la nación.
Por: Fortín Mapocho
