El Tribunal Oral en lo Penal de Arica condenó a dos funcionarios de Carabineros por el delito de torturas o apremios ilegítimos, cuya sentencia se dará a conocer el miércoles 7 de marzo. En tanto, otros seis funcionarios policiales fueron condenados por obstrucción a la justicia.
El dictamen respondió a la investigación abierta tras la querella interpuesta por la sede regional del Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) para determinar las responsabilidades del caso.
Los hechos ocurrieron el día 30 de agosto de 2012, fecha en que uno de carabineros ingresó al recinto policial en el cual se encontraba una persona detenida acusada del robo de un vehículo de propiedad del uniformado.
De acuerdo con las indagatorias del caso, en el calabozo el funcionario policial procedió por más de quince minutos a golpear al detenido en el rostro y en la cabeza con un arma de fuego, mientras lo amenazaba de muerte para que se autoinculpara.
Además, el funcionario policial intentó que el detenido tomara un arma blanca, con la finalidad de que quedaran impresas sus huellas, para así obtener una evidencia falsa en su contra, pretendiendo así conseguir una imputación por un delito de mayor gravedad en contra del detenido.
Otros funcionarios policiales presentes en el recinto policial no hicieron nada para impedir las torturas, ni tampoco denunciaron el hecho a sus superiores.
Al siguiente día, antes de que el acusado fuese trasladado al tribunal para el control de detención, el teniente de Carabineros ingresó nuevamente al calabozo, indicándole al detenido que lavase su cara ensangrentada. Ante la negativa de éste, el carabinero volvió a agredirlo, según consta en la investigación.
