Como una señal positiva ante la crisis institucional que sobrelleva la policía uniformada, calificó el presidente del Consejo para la Transparencia (Cplt), Marcelo Drago, la renuncia del general director de Carabineros, Bruno Villalobos y del jefe nacional de la Unidad de Inteligencia, general Gonzalo Blu.
“La renuncia del general director es el primer paso en las profundas medidas que debe tomar Carabineros. Sin embargo, es necesario seguir avanzando en transparentar esta institución, considerando también la realización de auditorías externas, independientes e imparciales sobre los recursos, pero también sobre el personal”, señaló.
A continuación, añadió que “el general Pineda, o quién se nombre en definitiva, debe hacerse cargo del indispensable cambio de rumbo que requiere Carabineros y resituar dónde corresponde a una institución tan importante para el país”, detallando que el Cplt “estará observando las medidas que propondrá el Ejecutivo para colaborar en lo que se requiera”.
La semana pasada, Transparencia ofició a Carabineros, entregándole una serie de recomendaciones destinadas a superar la crisis institucional derivada de un desfalco que ya sobrepasa los $26 mil millones. El documento plantea una serie de propuestas tendientes a reforzar los niveles de probidad y transparencia en la institución. Entre ellas se cuentan, la realización de auditorías externas y la elaboración de un diagnóstico público de actos irregulares.
Durante la tarde de ayer, se hizo público un video de despedida del general Villalobos, que además de pedir perdón por eventuales faltas, recalcó los ataques que se realizaron a la “credibilidad institucional” de carabineros.
“Diversos actores políticos y sociales indicaron la necesidad de que no continuara al mando (…) las razones esgrimidas son variadas y apuntan a una presunta ausencia de control en la institución”, señaló Villalobos en sus declaraciones.
Sin embargo, Drago valoró –precisamente- que haya sido el control social de autoridades, ciudadanos y medios de comunicación quienes empujaran la necesidad de orden en la institución.
“Todos estamos preocupados por el estado en que han dejado a la policía uniformada. En nuestro caso, nuestro afán siempre ha sido tener una actitud de responsabilidad y apoyo institucional en el entendido que Carabineros es de todas y todos los chilenos. No vemos nada personal en los cuestionamientos al renunciado general, sino la legítima preocupación por una institución fundamental para Chile”, concluyó el presidente del Cplt.
