Fueron 255 los secretarios regionales ministeriales anunciados este lunes a través de cada intendencia, donde el partido que lideró las nominaciones fue RN con un 36,8% de los nombres. Entre ellos, se cuenta el regreso de una de las más mediáticas del primer gobierno de Sebastián Piñera: la nuevamente designada seremi de Salud, Rosa Oyarce.
Se hizo conocida a fines de 2010, cuando llegó al cargo y empezó a realizar frecuentes fiscalizaciones a restaurantes, bares, picadas, hasta parques de diversiones. Con su delantal blanco y el cartel de “prohibición de funcionamiento” en sus manos, la tecnóloga médica se convirtió en una muy mediatica paladín de la higiene.
Polémicas e irregularidades
Pero Rosa Oyarce cuenta a su haber con polémicas y denuncias de irregularidades que van más allá de su perfil mediático. Así, durante su primera etapa como SEREMI en el primer gobierno de Sebastián Piñera, el año 2012 fue duramente cuestionada por irregularidades en su gestión, de hecho, un informe de la Contraloría estableció irregularidades y desórdenes en la labor desempeñada por la secretaría regional ministerial, entre los que se cuentan mala administración de bodegas, fallas en los instrumentos que miden la calidad del aire en la Región Metropolitana y la desaparición de 300 toneladas de alimentos importados que fueron rechazadas para su ingreso y consumo, acusación que Oyarce desestimó a sus predecesores en su cargo, pese a que el informe citado establecía su responsabilidad, sin embargo, el Ministro de Salud de la época Jaime Mañalich la confirmó en su puesto.
Posteriormente el año 2013 se vio envuelta en una polémico y muy publicitado conflicto con médicos y el colegio profesional de los juramentados hipocráticos, al presentar una acción legal en contra de 150 médicos por el otorgamiento de licencias supuestamente fraudulentas, en la oportunidad Enrique París, señaló airado: “Me molesta esta situación, porque hemos apoyado el labor de las autoridades sanitarias y lo peor es que la denuncia se hizo con escándalo”, haciendo notar que la acción judicial era indiscriminada y parecía motivada solo por el afán de hacer ruido en los medios de comunicación.
En su primera gestión, a menudo le correspondió atender urgencias sanitarias en horas de la madrugada, como cuando apareció una alerta de cólera y llegó al aeropuerto a atender la entrada de extranjeros a las 04.00 AM.
Su actividad se incrementaba con las fechas especiales, y se le podía ver fiscalizando dulces antes de Halloween, juguetes antes de Navidad y pescados y mariscos antes de Semana Santa.
También se hizo conocida por su enemistad pública con la mayonesa casera, la contaminación cruzada y los atentados a la cadena de frío. Tanto, que en 2012 relató que cuando acudía a comer donde sus amistades, tenían la precaución de no preparar ni dicha mayonesa ni ceviche crudo.
En aquella oportunidad, defendió sus fiscalizaciones como una manera de garantizar la tranquilidad al momento de comer en un lugar público. “Cuando prohibimos el funcionamiento, el compromiso del dueño es volver a abrir con una cara limpia y con la frente en alto”, afirmaba entonces. “Muchas personas me mandaban mensajes diciendo ‘pero cómo se le ocurre (cerrar un restaurante)’, ‘pero cómo, si yo almuerzo ahí’. Y mi respuesta siempre era: Siéntanse felices, porque se va a limpiar el local y, cuando se abra, van a comer con tranquilidad”, añadió.
Sin embargo su gestión fue frecuentemente criticada por el mundo médico y los gremios por cuanto sus actividades eran más efectistas que efectivas, y parecían responder a una agenda política más que a la genuina preocupación por la salud de las personas.
Otro episodio conflictivo de la tecnóloga médica se generó al polemizar con el programa “contacto” de canal 13, acusando al espacio de periodismo investigativo de “no hacer bien su trabajo llevando a la pantalla una investigación inadecuada”. El reportaje del canal de Luksic denunciaba que ciertos aceites comercializados en nuestro país no eran aptos para el consumo humano, el programa fue censurado y cuando finalmente fue emitido, la polémica Oyarce descalificó la investigación periodística y llamó a consumir los aceites denunciados con tranquilidad, pero nunca quedó claro si efectivamente se habían hecho análisis para justificar ese llamado o respondía a otras necesidades políticas o comunicacionales.
Su agenda política la llevó a ser candidata al senado el 2013 por la Región del Bio Bio, en la lista de Renovación Nacional, sin embargo, esa postulación tampoco estuvo exenta de polémicas, pues Oyarce se permitió firmar un acuerdo de apoyo mutuo con el también postulante al senado del PRO Rafael Garay, si, el mismo economista acusado de innumerables estafas y que huyó del país el año 2017 para ser capturado en Rumania y traído a Chile a responder ante la justicia, así los candidatos se reunieron en Concepción para firmar un proyecto de perfeccionamiento del sistema de pensiones desarrollado por el economista y propuestas en salud elaboradas por el equipo de la ex seremi metropolitana del ramo, lo que provocó una ácida polémica al interior de la derecha en la región escalando incluso a nivel de directivas nacionales.
A mediados del año pasado, Oyarce se presentó a las elecciones parlamentarias, compitiendo por un cupo en el distrito 10. Su postulación, considerada como una “revancha”, pero perdió el cupo, obteniendo apenas un 1,4% de los votos, equivalente a poco más de 6 mil sufragios.
Durante su campaña, la ahora seremi afirmó que “lo que a mí me mueve es la fiscalización de las instituciones del Estado” y que la situación que se vive en el país con respecto a temas de salud es “indigna”.
foto: Publimetro