“Sin duda alguna” debe “dar un paso al costado”. “Yo no soy juez para decir si él incurrió o no, pero el bien del pueblo de Dios pide de parte de él la disponibilidad”. Así lo señaló el Arzobispo de Santiago, monseñor Ricardo Ezzati, refiriéndose al obispo Barros, tras una reunión con los sacerdotes de Santiago en la Catedral Metropolitana. En ella se reflexionó sobre el mensaje del santo padre en la carta que fue enviada a la Conferencia Episcopal con la orden de hacerla pública, por los abusos cometidos por miembros de la Iglesia y donde pide perdón porque no tuvo la información adecuada.
Además monseñor Ezzati dijo que “creo que es una falta muy grave que se haya engañado al Santo Padre, que alguien haya pretendido engañarlo. Quienes hayan cometido esta falta necesitan reconocerla, arrepentirse y reparar el mal”. “No sé quiénes, cuántos, ni cómo han informado al Santo Padre. Solamente puedo decir que lo que hemos informado personalmente y como Conferencia Episcopal, y le puedo asegurar que no lo hemos engañado”, aseguró el prelado. Consultado si consideraba necesario que Barros diera “un paso al costado”, Ezzati respondió: “En mi opinión, sin duda alguna, por el bien del pueblo de Dios”, añadiendo que “no soy juez para decir si encubrió o no”.
En tanto, en una actividad diferente realizada hoy en la capital, James Hamilton, una de las víctimas del ex párroco de El Bosque, Fernando Karadima y que han denunciado el encubrimiento por parte del obispo Juan Barros y otros sacerdotes, confirmó que la próxima semana viaja a Roma junto a otras víctimas -Juan Carlos Cruz y José Andrés Murillo-, para reunirse con el Papa Francisco. Dijo que esperan “acciones concretas” y recalcó que “el abuso de menores es un crimen y debe ser denunciado. Cuando no se denuncia se transforma en complicidad”.
