El sondeo, que aporta los datos más fidedignos conocidos hasta ahora en tanto las personas respondieron aportando su RUT, arrojó que la mayoría de la población trans tiene conciencia sobre su identidad de género antes de los 10 años, sin embargo, durante su infancia mantiene en reserva su realidad producto de una fuerte discriminación social que las lleva a infligirse daño y a evitar ciertos lugares por el temor a insultos y amenazas.
Junto a la discriminación social, la carencia de información, facilidades y recursos económicos para cambiar su nombre y sexo legal y para modificar su cuerpo también afecta la felicidad y la expresión de género de las personas trans, por lo que consideran de la máxima relevancia la aprobación de leyes y políticas públicas que resuelvan sus problemas y garanticen la plena igualdad de derechos.
“La situación que vivimos los hombres, mujeres y personas trans no binarias es dramática. Estamos hablando de hechos que ponen a diario en jaque nuestra propia vida. Los resultados de esta encuesta deben invitar a la reflexión social. Las autoridades deben aprobar en breve la Ley de Identidad de Género considerando a la niñez y la infancia trans, en tanto es el momento cuando parten nuestros problemas”, señaló el activista trans del Movilh, Álvaro Troncoso.
En tanto, el dirigente del Movilh, Rolando Jiménez, estimó que “estamos sobrecogidos con estos tristes resultados cuyos responsables son la sociedad como conjunto y el Estado. Quiero agradecer a todas las personas que nos dieron su testimonio y confiaron en nosotros, aportando su RUT para contribuir a hacer un estudios serio que vaya en ayuda de otras y otros”.
IDENTIDAD Y EXPRESIÓN DE GÉNERO
La Encuesta Identidad arrojó que 59,17% de la población tiene conciencia de su transexualidad antes de los 10 años y el 25,9% entre los 11 y 15 años. Sin embargo, antes de los 10 años solo el 3,7% habló con alguien sobre su identidad de género. La mayor parte (44,2%) lo comenta entre los 16 y 20 años.
El 41% optó por comentar su transexualidad por primera vez a sus amigos (41%), seguido por la pareja (18,4%), la mamá (10.2%), otro familiar (8.7%), un profesional de la salud (7.2%) y el papá (3%), entre otros. El 5.6% señala que “nadie sabe soy trans”.
En relación a la expresión de género en público, el 32,3% lo hizo por primera vez entre los 16 y 20 años; el 26.3% entre los 11 y 15 años y el 20.7% entre los 21 y 30 años. El 16,2% indica que aún no expresa su identidad en público y solo el 23% señala que en la actualidad “todos saben soy trans”.
“Estos datos reflejan que pese a saber quienes somos desde que tenemos uso de razón, debemos reprimir nuestro género, sin siquiera a atrevernos, en muchas ocasiones, a hablarlo, todo es causado por diversas formas de discriminación que tienen un nocivo impacto en nuestra estabilidad física y emocional”, dijo Troncoso.
LA DISCRIMINACIÓN A LA POBLACIÓN TRANS
Además, un 76,1% de la población trans dice que ha sufrido discriminación en razón de su identidad de género, mientras el 7% señala que en el último año ha vivido exclusiones “diariamente”, el 11% “semanalmente”, el 21.2% mensualmente y el 18.8% un “par de veces o más”.
La discriminación más recurrente es la verbal (63.9%), seguida por la psicológica (47%), la negación de servicios públicos o privados (17,7%), la agresión física, (13,5%) y el abuso sexual (7,9%).
Las personas trans sindican como responsables de los abusos a desconocidos (44.4%), seguidos por familiares (32,7%), los compañeros de estudios (22.2%), un conocido (21,8%), un docente (19.9%), un funcionarios de instituciones públicas o privadas (11,3%), un policía (10.5%), un compañero de trabajo (10,2%), personal médico (9,8%) y un supervisor o superior en el trabajo (7,1%).
