Gendarmería de Chile descartó que el condenado por delitos de lesa humanidad, Gustavo Muñoz, quien se encontraba cumpliendo condena en el penal de Punta Peuco, haya muerto engrillado en el Hospital de Carabineros, asegurando que dichas informaciones “son falsas”.
Muñoz de 75 años y quien fue sentenciado por la justicia a 10 años de cárcel por el homicidio y secuestro calificado del militante socialista, Cesar Ávila, falleció ayer martes tras complicaciones de un cáncer terminal que lo aquejaba.
En este sentido, el abogado defensor del otrora carabinero, Raúl Mesa, aseguró que el ex funcionario policial habría muerto engrillado, hecho por el que se presentaría una querella.
Al respecto, Gendarmería informó que el interno “no estaba engrillado al momento de su deceso. Esto puede ser corroborado con el mismo centro asistencial, lo que desmiente versiones y material fotográfico que ha circulado en las últimas horas. A ello se agrega lo señalado por personal médico e institucional a cargo de su tratamiento, traslado y vigilancia, respectivamente”.
En este sentido, la institución penitenciaria indicó que Muñoz fue trasladado hasta el Hospital de Carabineros, luego de presentar un deterioro de su estado de salud, falleciendo a las 13.10 horas en uno de los boxes del recinto asistencial.
“Gendarmería de Chile lamenta la divulgación de informaciones falsas y pide mayor rigurosidad en el tratamiento de las mismas”, finalizó el comunicado.
Gustavo Muñoz fue uno de los reclusos de Punta Peuco que pidió a la Mandataria Michelle Bachelet, el indulto presidencial, el que finalmente no fue concedido.
